sábado, 19 de febrero de 2011

Innovación



He estado participando en un foro interesante, con el oportuno título de "innovación y sostenibilidad", que contaba la participación de diferentes actores que están directamente relacionados con ello y lo cierto es que ha sido interesante, siempre se aprende en estos sitios.
En mi opinión la innovación cuesta dinero y por supuesto hay que pagarla, de hecho no creo que hasta ahora se haya negado por parte de la administración la financiación de un tratamiento que realmente sea necesario y sobre el que haya un consenso claro en cuanto a su utilidad y eficacia clínica.
El problema está en ponerse de acuerdo en qué es innovación, porque aquí si nos encontramos con que cada uno cuenta la feria como le va a él mismo o la frase tan clara de que "cada uno ve las cosas del color del cristal con que se mira". Reconozco que yo también tengo mi cristal, no sé si es bueno o malo, pero es el mío y es el que me creo. Intento que sea lo más claro y objetivo posible, pero no tiene por qué coincidir con el de otros y seguro que muchos consideran que no tengo razón.
Cuando nos hablan de innovación creo que hay que ser serio, no todo es innovar, lo siento pero no. Si yo a mi coche le pongo una pegatina reflectante seguro que se ve mejor de lejos, pero no puedo decir que he innovado. No puedo decir que si antes valía 15.000 euros ahora como tiene pegatina va a costar 20.000, porque el que lo fuese a comprar me diría que la pegatina es chula, que brilla mucho... pero que lo que aporta no se puede pagar tan caro. Otra cosa sería que yo a mi coche le pusiera un aparatito para que él solo se busque aparcamiento cuando voy al centro... eso sí es un valor añadido que eleva el coste del producto.
Sé que el ejemplo no es muy ortodoxo, pero creo que así queda todo más claro (y a lo mejor incluso vendo mi coche). Pero lo que pretendo decir es que no es de recibo que cuando caduque una patente de un medicamento y aparece el genérico, venga alguien y te diga que justamente ese mes sacan al mercado una maravillosa (y muy publicitada) "innovación" del mismo fármaco pero con una presentación bucodispersable, efervescente o lo que sea... o que te presenten el eso-tal o el levo-cual como una gran innovación y que sin que eso suponga una mejora en la salud del paciente, haya que pagarlo tres veces más caro que el medicamento actual.
Sé que es complicado obtener nuevas moléculas con gran valor terapéutico, imagino que el coste es altísimo y el trabajo es duro. A lo mejor sí hay que pagarlo más de lo que se paga ahora, pero que sea para los casos en los que de verdad la molécula aporta realmente algo... sin cuentos sobre resultados intermedios, estudios publicados en un póster de un congreso, resultados significativos estadísticamente pero clínicamente irrelevantes y demás historias que lo único que consiguen es cabrearnos a todos.


Hoy os recomiendo un libro que me regaló mi jefe y que me había recomendado a su vez una amiga: El tiempo entre costuras, realmente agradable de leer y que te transporta al África colonial de una manera interesante. Engancha, se lee muy bien y te atrapa rápidamente.